El windsurfista portuense, de 31 años, comenzó a navegar con 7 años en Optimist en Puerto Sherry y ahora lucha por representar a España en los próximos Juegos Olímpicos de Tokyo 2020, para lo que cuenta con el apoyo del puerto deportivo
– ¿Cómo te sientes deportivamente hablando?
Tengo una madurez que antes no tenía. Tenía otras cosas, tenía físico, material y otras cosas, pero la experiencia y la madurez que tengo ahora no las he tenido en mi vida y eso me da mucha cabeza fría antes de competir y es lo que me ha hecho dar el salto de estar donde estoy, con muchas opciones de ir a una Olimpiada
– ¿Cuál es tu objetivo más inmediato?
En abril estuve en la Copa de Europa, clasificatoria para el Mundial de Aarhus y para los Juegos Mediterráneos. He quedado 13 de la general y primer español. Ha sido la primera vez en mi vida que en una regata tan importante termino como primer español y estoy muy contento, porque nunca había acudido a los Juegos Mediterráneos. Es como una olimpiada, vamos bajo la tutela del Comité Olímpico Español, a una villa olímpica. Estoy muy ilusionado de ir a un campeonato así, lo más parecido a unas Olimpiadas.
– Y con la cabeza puesta en las Olimpiadas… ¿cómo te ves?
Me veo con opciones, tengo la cabeza más fría que nunca. Yo he sido muy impulsivo y quizás eso a la hora de competir ha sido un hándicap, porque quería todo rápido, todo para ya. Ahora con los años y la experiencia he bajado las revoluciones y eso me ha hecho tener una perspectiva diferente de la competición, con la cabeza más tranquila, los conocimientos más asentados. Ésa va a ser una de las claves cuando nos juguemos la selección para las Olimpiadas.
– ¿Qué significa para ti ir a los Juegos Olímpicos?
Ir a las Olimpiadas es para lo que he estado luchando toda mi vida, llevo desde los 7 años navegando, empecé en optimist, me pasé a windsurf con 9 años y a RS:X con 17 años. Es mi sueño. Pero no he vivido por y para la Olimpiada, he intentado disfrutar de todos los campeonatos y entrenamientos y aunque nunca consiguiera ir a una Olimpiada no cambiaría nada de mi vida deportiva. Pero si culmino mi carrera deportiva yendo… sería increíble.
– La dificultad no está sólo en la competición, sino en conseguir apoyos, ¿cómo has llevado ese aspecto?
Cuando terminó la campaña olímpica 2016 fue uno de los momentos más duros de mi carrera, porque quedé segundo y a los Juegos Olímpicos solo va el primero de cada país. En ese momento me planteé tener algo más que el deporte y no depender de los apoyos federativos, porque depende mucho de la cúpula y te cambia de repente de un ciclo a otro y no puedes estar dependiendo de si te quieren ayudar o no cuando has dedicado toda tu vida a este deporte. Entonces decidí montar una empresa con Pablo Guitián, otro regatista que compite en finn, Escape Cube, y la finalidad era conseguir una seguridad económica y no estar dependiendo solo de apoyos institucionales y patrocinadores privados. Ahora están empezando a tener más recursos pero hemos pasado 10 años muy difíciles. Yo tenía varios patrocinadores privados y me quedé sin nada. Ahora estoy retomando otra vez los que tenía y algunos nuevos, como es el caso de Puerto Sherry.
Entrenamiento en Puerto Sherry
– Eres portuense y entrenas en Puerto Sherry desde pequeño, ¿es un patrocinio especial para ti?
Estoy supercontento de iniciar algo con Puerto Sherry, llevo toda mi vida aquí, vivo a 3 minutos de aquí, he pasado en Puerto Sherry la mayor parte de mi tiempo, por lo que mi unión es total. Además, lo veo un puerto deportivo y de ocio con un potencial increíble que durante un tiempo por el mal momento económico que hemos pasado ha frenado su desarrollo pero que ahora está tomando una nueva dirección y se están llevando a cabo muchas acciones para fomentarlo. Por eso me encanta la idea de ayudar a fomentar este desarrollo.
– ¿Qué destacarías de Puerto Sherry?
Tenemos las condiciones perfectas para entrenar, porque lo tenemos todo. Lo primero, las condiciones meteorológicas de la Bahía, es incalculable el valor que tiene para un regatista. Aquí puedes entrenar durante todo el año, no hay un mes donde el tiempo sea tan malo que no puedas entrenar. Tiene condiciones de viento y olas de todos lados, con lo cual te permite navegar con mucha ola, con poca ola, con mar plato, con viento constante, viento racheado… de todo. Si a eso le sumas las instalaciones, la playa asfáltica, que tu material ni toca la arena, con tu manguera para endulzarlo, el hangar para guardarlo todo, gimnasio y fisioterapia por parte del equipo de Fidias en las instalaciones de la Federación Andaluza de Vela, dispones de todo, no se puede pedir más. Es como un centro de alto rendimiento y con condiciones ideales todo el año. Por eso salen muchos regatistas buenos de Puerto Sherry.
– ¿Qué consejos le darías a los que se están iniciando en el deporte de la vela?
Que prueben todas las modalidades, porque hay muchísimas clases. Cada una tiene unas características y pueden aportarte cosas diferentes. En general, los deportes en el mar te aportan cosas que nunca te van llegar a aportar otros, es un estilo de vida. Los beneficios que te aporta son increíbles, te cambia la vida y la cabeza, en positivo. Estar ligado al mar es superpositivo. Cuanto más deporte practiquen en el mar más opciones tendrán de alcanzar la felicidad.
– Para terminar, ¿a quién no puedes olvidar agradecer su apoyo en esta carrera olímpica?
Tengo que agradecer a toda la gente que me apoya, hoy en día es muy complicado hacer una campaña olímpica en España dependiendo solo de apoyo institucional. Quiero agradecer su ayuda a la Federación Andaluza de Vela, que me está apoyando mucho, a Fidias y al club de Vistahermosa, por el que he navegado siempre. Contar a partir de ahora con la colaboración de Puerto Sherry es una gran ayuda de cara a la preparación de los Juegos Mediterráneos y el Mundial de este año.
